Durante los últimos meses, la tragedia del paro ha alcanzado cotas alarmantes en Alcalá de Guadaíra. Nuestro pueblo cuenta hoy con un número de desemplead@s que supera ya las catorce mil personas. No queda ya una sola familia alcalareña que no cuente entre sus miembros con alguna persona en edad de trabajar, que quiere trabajar y que no puede trabajar.
Desde todas las instituciones de gobierno --estatal, andaluz y local- se nos intenta convencer de que el paro es un problema pasajero, que llegó con la crisis y que desaparecerá cuando la crisis termine. Sin embargo, la realidad nos muestra una imagen muy diferente. Las estructuras económicas de Alcalá están siendo destrozadas, y desaparecen aceleradamente los sectores profresionales que en su día permitieron la creación de empleo.
Desaparece el escaso tejido industrial de la zona. Alcalá, que se ha pretendido vender como el corazón industrial de Andalucía, apenas cuenta hoy con un puñado de naves de almacenamiento. Al cierre de empresas históricas como Flex o Gillette hay que sumar el cierre de Roca, que hace un mes anunció que se marcha de Alcalá y que nos deja con cientos de nuevos parados.
El pequeño comercio y la empresa familiar se asfixia ante la competencia desleal de los grandes capitales. La instalación en nuestro pueblo de multinacionales como Eroski o Makro, que sólo ha servido para crear un número insuficiente de puestos de trabajos marcados por la temporalidad y la precariedad, hace imposible la supervivencia de la pequeña y mediana empresa, que también ha dejado de ser una salida para los trabajadores alcalareños. El cierre de Radio Luz es un claro ejemplo de la crisis definitiva de un tejido empresarial local engullido por la competencia de los grandes capitales.
Y mientras tanto, también los desempleados ven crecientemente recortados sus derechos y prestaciones sociales. Si el pasado 11 de julio el gobierno central aprobó una batería de medidas que convierten a los desempleados en pobres e invisibles, desde entonces el gobierno andaluz y el gobierno de Alcalá han hecho contribuciones en la misma línea. Con los recortes presupuestarios, han desaparecido de nuestro pueblo todas las oficinas del servicio Andalucía Orienta. Si en 2011 teníamos tres de estas oficinas, hoy ya no queda ninguna. Hoy los desempleados de nuestro pueblo son más pobres, porque tienen que pagar un desplazamiento a Sevilla cada vez que necesitan acceder al Andalucía Orienta. Y son sobre todo más invisibles, porque cada vez tienen menos lugares a los que dirigir sus necesidades, sus demandas y sus reivindicaciones.
Por todos estos motivos, esta concentración pretende reivindicar un cambio radical en las políticas públicas de empleo. Exigimos un cambio en el modelo productivo que priorice la dignidad de las personas y que garantice los derechos de los desempleados a través de la inversión pública. Estamos convencidos de que juntos podemos cambiar las cosas. Quieren dejarnos en el paro, pero no vamos a quedarnos parad@s. Seguiremos desarrollando movilizaciones de una intensidad creciente hasta arrancar de nuestros representantes un compromiso firme y verificable por el empleo en Alcalá.
Desemplead@: no te quedes parad@! Todos a la lucha!
FECHA: VIERNES 18 DE ENERO
HORA: 11:30 HORAS
LUGAR: FRENTE A LA PUERTA DEL AYUNTAMIENTO DE ALCALÁ DE GUADAÍRA
¡Viva Andalucía libre!
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